Tras varios años de espera, el nuevo centro de internación provisoria y régimen cerrado para jóvenes será una realidad.
Ello, luego que el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Luis Cordero, realizara el anuncio y visitara, junto a la directora regional de Tarapacá del Servicio de Reinserción Social Juvenil (SRJ), Liliana Romero; el seremi de Justicia, Pablo Valenzuela; y el delegado presidencial de Tarapacá, Daniel Quinteros, el terreno donde se construirá este nuevo y moderno recinto de justicia juvenil, emplazado a un costado de la cárcel concesionada de Alto Hospicio.
“A este costado (de la cárcel) se va a desarrollar el nuevo centro de justicia juvenil, en el contexto de la implementación de la zona norte, de acuerdo a ley que establece la instalación gradual del Servicio de Reinserción Social Juvenil. Esto va a permitir en esta zona el desarrollo de un polo penitenciario significativo. Es posible, a futuro, seguir desarrollando para el Servicio de Reinserción Social Juvenil y para el penal, mayor infraestructura, ya que este espacio permite combinar seguridad y reinserción”, comentó el ministro Cordero.
De acuerdo a antecedentes del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos, el proyecto para el diseño del nuevo centro cerrado se encuentra en proceso de licitación pública. Una vez que se cuente con el diseño final, se iniciará la construcción del nuevo recinto, que estará bajo la administración del SRJ de Tarapacá.
Para la directora regional del SRJ, Liliana Romero, el anuncio por parte del secretario de Estado es una muy buena noticia para la región, “ya que es una iniciativa largamente esperada, que permitirá trasladar el centro cerrado de Iquique a un recinto nuevo con una infraestructura moderna, “que optimizará el trabajo que realizamos como servicio para procurar la reinserción e integración social de nuestros sujetos de atención”.
De acuerdo al proyecto, el nuevo complejo contará con una superficie de cinco mil metros cuadrados aproximadamente, donde se emplazarán las oficinas administrativas del centro, servicios generales, bodegaje y un área para Gendarmería. El recinto contará con módulos destinados a la internación provisoria e internación en régimen cerrado, con una capacidad de 72 plazas para hombres y mujeres. Además, tendrá escuela, gimnasio, talleres laborales y complementarios, área de salud física y mental, entre otros.
El ministro Cordero explicó que este centro cerrado en la región, así como en otros lugares del país, “está diseñado para generar nuevas oportunidades para las y los jóvenes en conflicto con la justicia. Es por ello que necesitamos una infraestructura diseñada para ese fin, ya que estos centros no sólo tienen el propósito de la custodia y cumplimiento de una medida o sanción, sino también permitir la reinserción de las y los jóvenes a la sociedad”.