El presidente de la UEFA, el esloveno Aleksandar Ceferin, ha acusado a los periodistas de haber exagerado al informar sobre el beso que el expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, dio a la jugadora Jenni Hermoso tras la final del Mundial femenino.
Este martes, Ceferin atribuyó a dicha exageración el hecho de que el dirigente español esté acusado de delito grave por aquel repudiable acto.
“Cuando leo que se trata de un delito penal, como abogado de Derecho Penal, me parece completamente ilógico. Los periodistas llevaron esta historia a tal nivel”, aseguró el mandamás de la UEFA a los profesionales de la prensa de la televisión regional N1 que lo entrevistaron.
El directivo europeo hizo esas declaraciones después de admitir que la acción de Rubiales fue “inapropiada e imprudente”, razón por la cual “se trataba de una batalla que no podía ganar”. “No podía quedarse” en el cargo que ocupaba, apostilló.
Además, señaló que habló de la situación varias veces con el expresidente de la RFEF y le aconsejó que dimitiera, admitiendo que hacen falta cambios en la cultura reinante en el fútbol con respecto de las mujeres.
“Necesitamos un código de conducta que establezca claramente los límites del comportamiento aceptable y determine las consecuencias cuando se cruza la línea”, afirmó.