Transparentar las posiciones y las críticas de un sector a otro fue un paso que tanto el Gobierno como Chile Vamos valoró. Personajes que asistieron a la reunión dieron cuenta que la discusión sobre los temas que estaban en tabla no se abordaron como se tenía planeado, si no que aprovecharon de marcárselos puntos unos a otros, como las críticas a Sergio Onofre Jarpa que había molestado a RN y que fue destrabado por la ministra Camila Vallejo.
Asistentes destacaron el marco de respeto, de franqueza y que en ningún caso hubo alguien que se haya querido parar de la mesa. Aún cuando no se acordaron puntos de agenda, la reunión en sí misma significó un avance para allanar el terreno de conversaciones que se avecina, no hubo avances concretos, convirtiendo la reunión en una oportunidad de catarsis política.