The Clinic hizo una revisión anual de las cifras del trabajo legislativo, que dan cuenta de dispares números entre parlamentarios según la asistencia, intervenciones en las discusiones en salas y presentaciones de mociones parlamentarias. El senador Jorge Soria admite que ha sacrificado la asistencia en pos de cuidar su salud. A la fecha, ha acudido solo al 64,7% de las citaciones y no ha presentado ningún proyecto de ley. Las intervenciones de la senadora independiente Fabiola Campillai también son escasas. ¿Los “récords”? El extimonel de RN, el senador Francisco Chahuán, con 106 proyectos de ley con su firma y Fidel Espinoza (PS), quien ha pedido la palabra en 111 ocasiones.
Aún restan un par de semanas para el cierre de la legislatura en curso. Pero con los datos a la vista ya se puede realizar un balance del Senado en 2023. Dentro del segundo año del período 2022-2026 en la Cámara Alta, las cifras de trabajo en sala reflejan parte de la actividad parlamentaria, sin contar las actividades de los representantes en sus semanas territoriales.
De acuerdo al desglose revisado por The Clinic, y contabilizando 85 sesiones en sala citadas a la fecha de la recolección de los datos en el sitio web del Senado, el parlamentario por la Región de Tarapacá, Jorge Soria (PPD), registra la más baja asistencia. Solo ha acudido a la sede del legislativo en 55 ocasiones. Y se ausentado en 30 ocasiones.
En sus apariciones en el hemiciclo tampoco destaca por tomar la palabra durante las discusiones legislativas: del 11 de marzo de este año a la fecha, Soria ha realizado cinco intervenciones.
Los problemas de asistencia del representante por la región de Tarapacá no son una novedad en el Senado. En el cargo desde 2018, desde la aparición del Covid-19, el parlamentario ha tomado resguardos respecto de la asistencia.
A fines de 2021 se discutió respecto de la pertinencia de continuar con las sesiones de forma telemática, considerando los altos índices de vacunación en la ciudadanía. El acuerdo, en ese entonces, para el período legislativo entrante fue no prorrogar esa disposición. Bajo ese escenario, y en vista de su avanzada edad, en el equipo del senador admiten que ha optado por sacrificar su asistencia a Valparaíso.
En esa misma postura desde ese entonces, en el equipo del senador, respondieron a The Clinic que el parlamentario de 87 años “tiene recomendación médica permanente de evitar aglomeraciones para prevenir el contagio de Coronavirus y otras infecciones respiratorias que representan una amenaza mayor a los adultos mayores”.
Problemas de salud en el Senado
Hace pocas semanas atrás, confidencian en el entorno del PPD, dos senadores reportaron un diagnóstico de Covid-19. Uno de ellos había compartido de cerca con el senador. También aluden a otras limitaciones de movilidad que han mermado su concurrencia al hemiciclo, como intervenciones en sus rodillas y columna. Sin embargo, según los mismos datos que provee la página de la corporación, sólo siete de sus 30 inasistencias cuentan con alguna justificación médica.
El exalcalde de la comuna de Iquique tampoco ha presentado proyectos de ley durante este año. ¿Su justificación? En su equipo responden que “el senador ha indicado reiteradamente que le parece un despropósito estar presentando más y más proyectos de ley que hacen inflar las estadísticas, antes que despachar los proyectos que ha pedido el Presidente Boric como la agenda de seguridad, la reforma previsional y tributaria”.
El caso de la senadora independiente por la Región Metropolitana, Fabiola Campillai, es distinto. La parlamentaria registra una asistencia a 75 sesiones, con la mayoría de sus ausencias justificadas, pero junto con Soria, ha intervenido apenas cinco veces durante la discusión en sala. Y solo cinco proyectos llevan su firma del 11 de marzo de 2023 a la fecha.
La senadora replica a este medio que “pueden existir distintos motivos detrás de un mayor o menor número de intervenciones en sala. Este año asumí las presidencias de las comisiones de Ética, también de Familia, Infancia y Adolescencia. E integro la comisión de Derechos Humanos. Además de mi activo trabajo territorial, lo fundamental es evaluar si mis intervenciones lograron aportar a la discusión. Y si interpretaron los intereses de quienes estoy llamada a representar”.
Sobre el volumen de mociones legislativas, Campillai afirma que “presentar proyectos de ley es una forma de influir en la agenda legislativa buscando soluciones a problemas específicos. El impacto profundo de un solo proyecto puede ser aún más significativos que su cantidad. Como es el caso del proyecto que presentamos de reforma al reglamento del Senado para que se cree la comisión de discapacidad, lo cual aportó en la discusión para que volviera a constituirse la comisión de Adulto Mayor y Discapacidad en el Senado (…)”.
Fuente: The Clinic